jueves, 23 de julio de 2009

ALGO DEBIERAN APRENDERLES A DANIEL CORONEL Y A MARÍA CRISTINA URIBE, SEÑORES DE RCN, CARACOL Y CM&.

POR: ARTURO MUSKUS VILLALBA

Con el fin de demostrarles lo amarillo canicular de los medios en Colombia escribí el presente comentario.

Cuando la comisión nacional de televisión y la ministra de comunicaciones María del Rosario Guerra recibieron los quejas por los altos costos de las prorrogas por parte de RCN televisión y Caracol ($80.000 millones de pesos por el uso de el espectro electromagnético por diez años), los noticieros de estos mismos canales mantuvieron muy laxa y comedida la información noticiosa a favor del gobierno. Lo debió observar hasta el más desprevenido de los asiduos televidentes noticiosos. Los únicos canales privados del país, con unos aires de sometimiento, de dadivosidad calculadora y estratégica fueron discretos y silenciosos para no despertar la ira de Álvaro Uribe, en esos momentos claves en que sus escándalos seguidos era el plato de cada día. El gobierno vio una forma más de agarrarlos por la solapa para prevenirlos por cualquier evento de escozor y de inconveniencia, sobre todo cuando requería depurar oprobiosamente el efecto de esos escándalos concluyentes, como la Yidispolitica, las chuzadas, etc. Parece que en los ojos de la ministra se hubiera notado el guiño discreto de: —bueno habrá una rebaja de las prórrogas pero… yo veré, yo veré—. Resultó una vez más la estrategia de Uribe, porque la tempestad de los escándalos fue calmada por una brisa tenue y fresca circulante de una alameda.

Además, los pesos que dejan las pautas comerciales y las dadivas de los gobiernos corruptos a los periodistas le obstruyen al público a enterarse de informaciones noticiosas verídicas, para mantener su opinión lo más acertada a la verdad, a todo aquella acción que deberá ser considerada como justa. Cómo puede un noticiero hacer una crítica seria al gobierno, si es éste precisamente es quien le paga cifras considerables por pautas de contenidos sociales. Como el caso de las empresas de servicios públicos, por ejemplo: que en campañas de ahorro de energía, agua y gas contratan con los noticieros millonarios rubros y sus atentados sociales siempre quedan tras bambalinas. Es la forma más sutil de constreñir al ciudadano desprevenido para lograr un efecto, cuya consecuencia podrá descomedirse hasta elegir un presidente de la República, de imponer una reforma política de pérfidas intensiones, de coaccionar las autoridades judiciales, de proteger un delincuente, etc. etc.

A cada rato quedo estupefacto al ver los noticieros Caracol, RCN y CM&, cuando de una forma unilateral y descarada, se apoya con la daga de la imparcialidad, de la conformidad y la oportunidad, al gobierno actual, con la estrategia demoledora de la emisión de noticias que resalten la gestión del gobierno de Uribe y en contra de sistemas de gobiernos de perfiles opuestos o disímiles. Primero, abren el noticiero expresando la impopularidad en descrecencia de Chávez, cuando se sabe que existe en Venezuela sólo una media luna de estados muy poblados que lo superan, pero que la oposición mediática de ese país, de igual talante tolerante y arribista al de los noticieros en referencia, lo niega y afirma que la popularidad decrece. La opinión sensata de Venezuela sabe que el presidente sobrepasara en más de un millón de votos a la oposición. Si hubiera elecciones hoy mismo, Chávez sólo perdería en Nueva Esparta, Zulia, Táchira y Miranda, estados con mayoría de oposición de los 18 restantes.

Posteriormente arremeten contra Rafael Correa del Ecuador; gobierno de perfil socialista independiente y no alineado, con el cuento chino que su hermano es un contratista magnánimo de la nación. No es cierto. Luego arman un zambapalo con las declaraciones de un video del guerrillero de las FARC el Mono Jojoy, al igual que con el computador antibombas de Raúl Reyes, del cual aún no hay un solo implicado entre rejas. Sin embargo con hambre loca, recogen las lentejas sucias de inmoralidad tiradas al suelo por este gobierno, para acallar la verdadera noticia del escándalo de los hijos del presidente; de la entrada secreta de Job al Palacio de Nariño; de la Yidispolítica, de las chuzadas del DAS, del escándalo de Mosquera con los hijos del presidente y otros sucesos, qué si acaso hacen énfasis, las presentan somera y timoratamente en total camaradería descarada. Qué tristeza me da cuando oigo a señora la Vicky Dávila de CM& y la señora Claudia Hoyos… de 1,2y3. Parece que exhalaran feromonas al espacio, en un orgasmo arrebatador después de 100 años de la más prolongada abstinencia de sexo, cuando hablan de algunos triunfos del gobierno, de fracasos de la oposición y de las adversidades de algunos países. Creo que si estos noticieros compraran maíz para hacer arepas, tuvieran la cadena de asaderos más grandes de América, con las dádivas ofrecidas y recibidas por este gobierno corrupto del tapen tapen, con suma popularidad, al contar con unos medios como RCN, Caracol y CM&. Algo debieran aprenderles a Daniel Coronel y a María Cristina Uribe para al menos saber a conciencia que obran impecablemente.
Les escribiré a estos noticieros desestabilizadores y vendidos cada año, para sacarles pecho porque sé que ahora mismo no estoy equivocado en mi apreciación. Hipócritamente enfatizan violaciones de la libertad de prensa, cuando proceden idénticamente como las oligarquías propietarias de medios en América latina, monopolizadoras de opinión, que se enfilan contra gobiernos legítimos para evitar cambios substanciales que atentan contra su hegemonía, cuando la realidad descrita por Eduardo Galeano “las venas Abiertas de América Latina” está ahí palpable. ¿Cuantas cuñas les pautan los medios a los dueños del sistema, a los dueños del capital y del poder? Los que desprecian un sistema de gobierno diferente al actual, mientras el pueblo raso sigue y seguirá siendo más pobre y miserable.