martes, 24 de septiembre de 2013

SEÑORES URIBISTAS… ¡NO PODEMOS PENSAR QUE DEBEMOS SER LEALES ANTES QUE HONESTOS¡ MAS VALORES POR FAVOR.

La verdad de Arturo Muskus V


LA HONESTIDAD SIEMPRE VA  PRIMERO QUE LA  LEALTAD

SEÑOR EXMINISTRO OSCAR IVAN ZULUAGA, QUE BUEN GESTO DE HONESTIDAD LA SUYA CON SUS DECLARACIONES SOBRE JOSE OBDULIO GAVIRIA. 

 “UD ES MUY HONESTO PARA SER URIBISTA”


Señor Oscar Ivan Zuluaga, no tengo que adularlo limpiándole el polvo de la calle adherido a su chaqueta, por cuanto no profeso postulados del uribismo. Pero sí le reconozco plenamente y de frente, en mi calidad de colombiano, que usted ahora sí sacó su casta de hombre honesto, porque no ha comulgado con esas políticas objetadas comunes en el uribismo aunque participe en éste, como encubrir copartidarios por encima de la verdad y el honor. Usted sabe que lo que rebozó la copa de la insensatez, con lo que frecuentemente nos acostumbra Uribe, ha sido  el defender al filo de la daga y contra la verdad a Jorge Noguera Cotes, cuyos delitos cometidos cuando era el director del desaparecido DAS no le consigna la menor duda a ningún uribista serio y honesto; así podría citar muchos ejemplos, aún mas contundentes que el del mencionado personaje. No podemos pensar que debemos ser leales antes que honestos. Ese triste criterio practicado por Álvaro Uribe ha sido parte de su estrategia política y que ha pasado a ser proceder de ética en sus seguidores. Reiterando: defendió contra la verdad  a  todos sus copartidarios fustigados por la justicia colombiana obstruyendo pública y descardamente en sus procesos.  Es bueno ahora dilucidar, si lo que usted  le aduce al señor José Obdulio Gaviria para que renunciase a ser de la lista del partido Centro Democrático en las elecciones del  2014, es la misma circunstancia que obligó al presidente Juan Manuel Santos a renunciar a las políticas propias de Álvaro Uribe en sus 8 años de mandato.  Señor Oscar Iván Zuluaga, mi consejo sano y serio para usted, es que se mantenga en lo suyo, que soslaye inminentemente la triste y lamentable  reacción del exvicepresidente Francisco Santos, esbozada inmediatamente una vez usted leyó la carta a Jode Obdulio en los medios, y que simplemente fue la de endilgarle  lo putrefacto de la deshonestidad, aduciendo que no importa el pasado del siniestro señor, sino reconocerle solo haber sido el mejor escudero de Álvaro Uribe Vélez, aunque él mismo conoce claramente, como muchos colombianos, su pasado criminal. Por ser José Obdulio Gaviria un ciudadano particular, no;  ni por haber sido un excomunista de extrema izquierda..,  sino por estar inmerso en las aguas turbias del delito  perteneciendo a la cuerda del individuo más criminal que ha dado la historia de la violencia en Colombia: Pablo Escobar Gaviria, su primo.  
Ahora bien,  Si Álvaro  Uribe no opinó de inmediato, para sofocar de un tajo el suspenso y la incertidumbre en el seno de su partido, ante tan polémica declaración suya, fue porque lo está apoyando subrepticiamente al reconocer por él mismo o tal vez por muchos asesores, los altos  costos políticos que incurriría su partido al tener semejante tipejo en su lista al senado.
Si esta declaración suya que advierte pérdidas electorales con la participación de José Obdulio Gaviria en la lista del senado en las próximas elecciones, fue premeditada con su jefe Álvaro Uribe Vélez, sólo me quedará decirle, que no nos importa que nos hayan mentido, pero lo prevendría por compartir el acalorado ejercicio electoral venidero con este personaje de talante estratégico, muy calculador, egocentrista y marrullero en su locuacidad,  que lo atará a su poder, a su lengua mordaz y a la defensa contra la verdad de su objetada vida política,  como bien quiso hacer con el actual presidente Juan Manuel Santos.  
Arturo Muskus V
 

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Es que los uribistas son sucios y oscar ivan zuluaga no cabe en el uribismo, porque no es corrupto. Simón Gaviria.

Anónimo dijo...

Alvaro Uribe Velez. Maldito infame guerrerista. El dia que te maten no sonreire pero por dentro sentire un alivio. Deja quieto a Santos hacet la paz, la misma que con tus balas no pudiste